Warriors va recuperando piezas. La que realmente le faltaba era Draymond Green. El ala-pívot abrió anoche su particular temporada, y su presencia en pista no le sirvió de mucho a su equipo, que cayó de forma rotunda ante Portland en San Francisco por 25 puntos.
El 98-123 final muestra cómo Warriors ni atacó bien ni defendió bien. Desde luego, Green no fue ninguna panacea para los suyos. Habrá que darle tiempo, claro está.
Green venía de una lesión en el pie derecho y de dar positivo por coronavirus. Antes estuvo la pandemia y la no presencia de Warriors en la burbuja de Orlando. En resumen, llevaba 309 días sin jugar. No lo hacía desde el 27 de febrero del pasado año. De modo que poco se le podía pedir en su primera presencia en la pista.
El All-Star de Warriors jugó 17 minutos y 38 segundos partiendo de la titularidad e hizo 4 rebotes y 4 asistencias. No anotó. Falló los 3 tiros que intentó, 2 desde el triple.
Golden State puso en juego anoche a su quinteto ideal, a su cinco más esperado, toda vez que Klay Thompson se va a perder otra temporada. Stephen Curry, Kelly Oubre Jr., Andrew Wiggins, Draymond Green y James Wiseman formaron de inicio. Dicho así, por nombres, el quinteto suena realmente atractivo, pero hoy por hoy esos nombres están a años luz de su potencial juego.
Curry, que estuvo otra vez demasiado solo en ataque, aún está recuperando las sensaciones en la pista tras una lesión de muñeca que unida a la pandemia le dejó mucho tiempo fuera de juego.
Oubre Jr. y Wiseman están en plena fase de adaptación. El primero al equipo y el segundo a la NBA. El alero ha firmado un arranque de temporada ciertamente decepcionante. Se está mostrando muy errático en el tiro, y está restando más que sumando. En cuanto al novato, ya ha ofrecido parte de su fantástico catálogo, pero, claro está, le falta regularidad en el juego. Es un diamante en bruto, la mejor noticia para Golden State en este inicio.
Draymond Green es una incógnita. Si vuelve a ser el mejor Green, Warriors dará saltos de alegría; si sigue en la línea gris de la pasada temporada, Warriors tendrá un problema.
En cuanto a Wiggins, sigue sin dar el paso adelante que antes esperaban casi todos y ahora solo esperan algunos. Calidad le sobra, actitud… Ahí radica la cuestión.
Otro problema añadido para Warriors viene de las muchas dudas que genera su segunda unidad.
Lo cierto es que el equipo presenta marca de 2-3, pero es muy pronto para evaluar lo que dará de sí esta temporada, y complicado, porque las incógnitas son muchas.