El interés de los Suns en Chris Paul desplaza a Ricky Rubio
El mercado de la NBA empieza a bullir según se acerca el Draft 2020 (18 de noviembre), la primera fecha importante de ese periodo entre temporada y temporada. La moratoria para materia de traspasos, que no de fichajes de agentes libres (20 de noviembre), en la que está inmersa la liga norteamericana hace que se esté trabajando en acuerdos de intercambio de jugadores y el primero importante que suena amenaza la posición del único jugador español que tiene contrato asegurado para la próxima temporada: Ricky Rubio.
Brian Windhorst y Tim Bontemps desvelan en ESPN no sólo el interés que los Suns tienen por hacerse con Chris Paul sino que las conversaciones con los Thunder para llevarse al veterano «han ganado tracción» pese a que «el acuerdo no es inminente».
Los Thunder se han propuesto una renovación profunda y los nombres de Steven Adams y Chris Paul son los principales en la plantilla. Con ellos se quiere llegar a acuerdos que mejoren la salud de la franquicia, que goza de buenos jugadores jóvenes, para los próximos años. Supondría completar los cambios que ya empezaron con las salidas del año pasado, las de Russell Westbrook y Paul George.
El intercambio debería incluir una o más elecciones del draft y algún jugador. El que está en la rampa de salida y en boca de todos cuando se mencionan destinos es Kelly Oubre, alero, pero es inevitable pensar en la posición de Ricky Rubio. El base de El Masnou es el base titular de la franquicia desde la temporada pasada, en la que se adaptó divinamente a los esquemas que propuso su entrenador y, a sus 30 años, aseguró en repetidas ocasiones que se encontraba a gusto en Phoenix.
Se haría difícil que dos directores de tanto peso y con tanta necesidad de minutos pudieran convivir en la misma plantilla, por lo que el reemplazo de Paul por Rubio es lógico. CP3 coincidió con Monty Williams, entrenador de los Suns ahora mismo, hace años y también alabó su capacidad de entendimiento del juego. Paul cobra más que Rubio; en los dos años de contrato que les quedan a ambos en la NBA el primero estará en 85,5 millones mientras que el segundo se llevará 34,8 millones.